Hubo una mañana, no hace mucho, en la que estaba en mi cocina, sosteniendo una taza de café número cinco y preguntándome: «Espera… ¿esto sigue siendo normal?». No estaba nervioso todavía, pero me sentía un poco nervioso, ligeramente desenfocado y extrañamente cansado al mismo tiempo. Me golpeó: tal vez había cruzado una línea.
Como alguien que ama genuinamente el café (prepararlo, probarlo, hablar sobre él), nunca pensé que haría esta pregunta. Pero como ocurre con cualquier ritual, demasiadas cosas buenas pueden hacer que te sientas… no tan bien. Entonces comencé a investigar la pregunta: cuantas tazas de cafe es demasiado al dia— ¿Y qué significa eso para personas como nosotros que realmente aman estas cosas?
El hábito diario del café: una mirada a mi rutina
Hoy en día, suelo empezar con un espresso doble a primera hora de la mañana. Luego un vertido a media mañana. Luego, un atrevido flat white u otro espresso después del almuerzo. A veces, también se cuela una taza por la tarde.
En mi juventud, bebía aún más, simplemente porque amaba el sabor y el ritual. Pero comencé a notar patrones: un momento del día en el que mi concentración disminuyó en lugar de mejorar, o sentí que no dormía bien. Fue entonces cuando comencé a prestar más atención a mi ingesta.
Ahora sigo mis tazas libremente y compruebo cómo me siento. Algunos días, tres tazas se sienten bien. Otras veces, incluso dos lo presionan. Se trata menos de contar estrictamente y más de sintonizarnos.
Lo que dice la ciencia
La FDA sugiere que hasta 400 miligramos de cafeína al día Generalmente es seguro para la mayoría de los adultos. Eso es aproximadamente equivalente a 3 a 5 tazas de café, dependiendo de qué tan fuerte lo prepares.
Pero analicemos eso un poco:
- Un café preparado estándar de 8 oz tiene aproximadamente 95 mg de cafeína.
- Un trago de espresso está cerca 63mg.
- ¿Una taza grande o una cerveza fría? Podría fácilmente empujar 200mg o más.
Así que el “recuento de tazas” puede ser engañoso. Un solo vertido gigante podría rivalizar con dos o tres espressos. En mi caso, esas cinco “tazas” no eran en realidad cinco; estaban más cerca de 600 mg de cafeína, lo que explicaba mis pensamientos acelerados.
La ciencia nos ofrece una gama útil, pero no tiene en cuenta todo, especialmente la tolerancia individual.
Señales de que podrías estar bebiendo demasiado café
Aquí hay algunas señales de advertencia que encontré personalmente en los días en que me excedí:
- Nervios o un sutil sentimiento de ansiedad
- Sueño inquieto o despertarse demasiado temprano
- un aleteo, latidos acelerados del corazón
- Ocasional irritación del estómago
Las primeras veces que sucedió, lo descarté. Pero cuando se convirtió en un patrón, comencé a prestar más atención. Reconocer estos signos me ayudó a reducir mi consumo sin renunciar a mi ritual favorito.
Factores que afectan la tolerancia a la cafeína
¿La parte complicada? El límite de cada uno es diferente. Lo que es “demasiado” para mí puede estar bien para ti. La tolerancia a la cafeína está influenciada por:
- Genética – Algunas personas metabolizan la cafeína más lentamente que otras.
- peso corporal – Los cuerpos más pequeños suelen sentir más los efectos.
- Dieta y estilo de vida – La deshidratación, el estrés o la falta de sueño pueden magnificar el impacto de la cafeína.
Hice un pequeño experimento conmigo mismo: controlé cómo me sentía después de cada taza, probé sustitutos descafeinados y limité el consumo después de las 2 p.m. No me llevó mucho tiempo encontrar mi punto óptimo y ha marcado una gran diferencia.
Consejos para controlar el consumo de café sin eliminarlo
Nunca quise dejar el café. Sólo quería sentirme bien bebiéndolo. Esto es lo que me ayudó:
- Cambiar a medio café o descafeinado por la tarde (¡el descafeinado todavía tiene sabor!)
- Beber agua entre tazas para mantenerse hidratado
- Disfrutar de porciones más pequeñas y más intencionadas—a veces un espresso perfecto es suficiente
- Intentando alternativas bajas en cafeína como matcha, té de hierbas o incluso mezclas de achicoria cuando quiero algo caliente
El placer del café no está sólo en la cafeína: también está en la comodidad, el aroma y la rutina.
¿Existe algo llamado muy poco café?
Éste me hizo sonreír. También tuve días en los que evité deliberadamente el café y lo extrañé. No sólo la energía, sino la experiencia. Para mí, el café es una conexión: conmigo mismo, con un momento, con mi día.
Pero he aprendido que disfrutar del café y confiando en él no son lo mismo. Cuando comencé a beber de manera más consciente, mi sueño mejoró, mi concentración se agudizó y, lo creas o no, disfruté aún más de cada taza.
Encontrar su límite personal
Entonces… cuantas tazas de cafe es demasiado al dia? No existe una respuesta universal. Pero probablemente tu cuerpo lo sepa.
Para mí, tres copas fuertes es el límite superior. Cuatro es un tal vez. ¿Cinco? Eso es empujarlo.
Si amas el café como a mí, no es necesario que lo dejes, solo escucha. Observa cómo te sientes. Experimenta un poco. Y si te sientes cómodo, comparte tu rutina diaria de café en los comentarios. Me encantaría saber qué funciona para usted y dónde está su límite.